¿Está pasando solo en nuestras vidas o está pasando alrededor del mundo? ¿Qué pasa si nosotros no cambiamos? ¿Es una obligación para nuestras vidas o empresas llevar a cabo esta transformación digital?
En este blog desde Digitalegia vamos a resolver estas preguntas.
El mundo está cambiando queramos nosotros o no. Dicen que si nosotros permanecemos en el mismo lugar en realidad estamos retrocediendo, pero también si vamos a menos velocidad que nuestros competidores, retrocedemos relativamente.
Por lo tanto, lo único que nos queda es ir a la misma velocidad de los cambios externos y nuestros competidores o ir más rápido.
La transformación digital en el mundo es una mega tendencia que nadie puede detener, y además es una revolución acelerada y amplificada. Es una revolución, no una evolución porque son cambios muy rápidos. Es ampliada porque el rango de dispersión es cada vez mayor. Por esto es necesario que nuestras vidas y empresas estén preparadas para estos cambios.
Ya hemos visto que las cosas están cambiando fuera, pero la pregunta es ¿Está cambiando nuestra empresa? La transformación digital no es solo la incorporación de tecnología nueva dentro de nuestra empresa, sino la incorporación de modelos y procesos y una mentalidad con una visión nueva de negocio.
Entonces, no es transformación digital el comprar un sistema informático, el tener una página web o el estar en las redes sociales con nuestra página de Facebook. Inclusive no es transformación digital hacer e-commerce. Estos factores no representan una transformación digital de nuestra organización.
La transformación digital parte desde la base, desde la estructura, desde los procesos y desde la gente que compone las organizaciones. Es una forma de ver el mundo, una forma de comercializar y una nueva forma de crear productos y servicios.
También nos referimos con la transformación digital a hacia donde dirigimos nuestra inversión y que porcentaje otorgamos a las diferentes partidas presupuestarias.
Todos los años invertimos en nuevos proyectos, y la transformación digital implica dejar de invertir en estos viejos modelos de negocio. Aún cuando estos productos y servicios actualmente son el corazón de nuestra empresa y son exitosos, tenemos que dejar este iceberg que se está derritiendo. Salir de nuestro status quo es más salir de nuestro exitus quo, que es mucho más dañino.
El exitus quo es lo que nos lleva aferrarnos a lo que aún es nuestro éxito, pero nos impide movernos hacia nuevos lugares. No podemos dejar de hacer esta transformación digital tan necesaria para nuestra empresa hoy en día.
La transformación digital es acelerar nuestra empresa, convirtiéndola en algo nuevo. A nivel de analogía la podríamos comparar a la transformación de la oruga a mariposa que nos hará mucho más bella, más rápida y nos permitirá volar más alto.
No se trata de aferrarse a los modelos antiguos y modificarlos. Es crear una nueva empresa y un nuevo modelo de negocio a nivel de la mente, no de la tecnología. Ésta transformación digital es mucho más mental que tecnológica, y por eso hay que dar este paso adicional a romper con los estereotipos actuales empresariales.
Finalmente, no podemos hablar de transformación digital, sin hablar de las personas. Las personas son el motor de la empresa, somos quien mueve nuestra organización. Pero cuando hablamos de innovación y de cambio, son el mayor freno al cambio.
Las personas y gerentes exitosos usualmente quieren aferrarse a su exitus quo (pasado), al estatus quo de la empresa y evitan moverse a zonas que no controlan o a zonas desconocidas. Han sido entrenados para mantener el control de la empresa y moverse hacia delante es moverse a zonas nuevas, a océanos azules que se nos presentan delante, en los cuales sabemos que hay tiburones y el agua está fría.
Pero no solo se trata de la incorporación de tecnología, sino es el cambio de todo modelo de negocio, procesos y estructura y principalmente gente.
Con la llegada de la realidad aumentada, realidad virtual, sistemas de voz, técnicas inbound u otras técnicas, metodologías y tecnologías, que pueden ser incorporadas a nuestras empresas, nosotros tenemos la responsabilidad de hacerlo.
Piensa que nosotros, empresas del siglo XX estamos incorporando tecnología y modelos de negocio del siglo XXI, pero existen muchas empresas que están creándose en el siglo XXI y nacen ya con este genoma. Ya son mutantes, ya son agentes de cambio. Mutar significa cambiar, pero mutante significa ser agente de cambio y tenemos que incorporar todos nosotros estos agentes de cambio dentro de nuestra empresa u organización.
Los cambios e innovación no parten de abajo hacia arriba, parten de arriba hacia abajo y es responsabilidad de la alta gerencia implementar estos cambios. Por lo tanto es nuestra responsabilidad como gerentes incorporar y promoverlos y asegurar que existan en nuestra empresa.
Ahora que ya conoces más de lo qué significa la transformación digital y cómo puede aumentar tus ganancias, desde Digitalegia te apoyamos con tu estrategia y transformación digital. Tan solo debes de solicitar una asesoría gratuita de 15 minutos en Asesoría gratis, y te explicaremos cómo podemos ayudarte crecer.
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